Universidad del Tolima: en Paro

El día de ayer, los estudiantes de la Universidad del Tolima tomaron la decisión de iniciar un paro y un campamento dentro del campus, suspendiendo toda actividad académica y administrativa. Los estudiantes buscan respuestas a las demandas que el mismo estamento estudiantil viene pidiendo desde hace un largo tiempo a la administración de la universidad y hasta ahora, no ha habido respuesta.

A través de un comunicado, los estudiantes expresaron varias de las exigencias a la administración de la universidad, entre las que se encuentran el cese a la criminalización de la protesta, fin a los perfilamientos y procedimientos disciplinarios a estudiantes y profesores. además de eso. piden una retractación a las declaraciones del 16 de septiembre de este año, en donde se estigmatiza el proceso asambleario y el movimiento estudiantil.

Además de lo anterior, se exige la creación de una política más integral de salud para toda la comunidad universitaria. Para ello los mismos estudiantes piden crear una mesa de trabajo con entidades de salud para realizar un estudio y poder así crear dicha política, además de hacer una revisión al personal que presta servicio en la PSS (prestadora de servicio de salud), así como generar alianzas estratégicas con las Gobernación del Tolima para lograr una atención mejorada en esa área.

Otra de las demandas más importantes es la solicitud de un informe financiero sobre como ha sido el manejo de los recursos de la UT, explicando el uso de los fondos y la justificación de todas las decisiones financieras que puedan estar generando un detrimento Patrimonial. Sumado a esto, los estudiantes piden la renuncia de Marcela Barragán, directora de planeación y desarrollo institucional, al igual que la dimisión del cargo del Vicerrector administrativo, Mario López, quien es acusado de mala gestión financiera que ha ido afectando proyecto esenciales para el bienestar estudiantil y académico.

La comunidad estudiantil reafirma su compromiso con la defensa de sus derechos y hace un llamado a las autoridades universitarias para que respondan a sus peticiones, garantizando así un diálogo abierto que permita solucionar los problemas que afectan la vida académica de la institución.